Cuál es la diferencia entre un gasto y una inversión en las finanzas personales, si quieres conocer la respuesta te invito a continuar leyendo esta nota.
Gastar e invertir son palabras muy usadas, muy conocidas en el área de las finanzas, tanto personales como en el manejo de una empresa y que tienen muchos significados.
Pero es en el área de las finanzas personales donde muy comúnmente la gente tiene la creencia de que estos conceptos son sinónimos.
Sin embargo, es necesario reconocer la importante diferencia que existe entre ambos conceptos, ya que ello nos puede evitar muchos dolores de cabeza en nuestra economía personal.
Parecen ser sinónimos, ya que tanto si gastamos como si invertimos sale dinero de nuestro bolsillo, porque en ambos casos compramos algo. Es decir, recibimos algo a cambio de un precio.
Una comida, unas vacaciones, un coche, una vivienda o acciones de una empresa son ejemplos de compras que realizamos. En todas ellas recibimos algo a cambio de un precio.
Cuál es la diferencia entre un gasto y una inversión en las finanzas personales
Para entender esto, te hago la siguiente pregunta ¿Crees que el gasto es malo y la inversión es buena?
Pon atención de acuerdo a lo que respondiste, en ambos casos puede ser un acierto o un error, dependiendo de si lo recibido cumple con lo que esperamos o no.
En realidad, cuando adquirimos algo, gasto o inversión, siempre es porque nos resuelve una necesidad presente o futura.
La diferencia entre gasto e inversión está en el momento del consumo. En el primero de los casos, en el gasto, la compra y el consumo coinciden. Por ejemplo, una comida en un restaurante la adquirimos y la consumimos en ese momento. ¿Cubre una necesidad? Por supuesto. Una necesidad presente: saciarnos el hambre.
¿Es mala idea comer todos los días? Yo creo que no, por tanto, los gastos no son malos, son efímeros. Desaparecen al instante. Ir al cine o acudir al médico también son gastos, porque se consumen en el momento de adquirirlos, pero no por ello no han sido necesarios, placenteros o ambas cosas. Esto no significa que algunos gastos sean necesarios y otros superfluos.
¿Y cuándo es una inversión en lugar de un gasto? Cuando se trata de adquisiciones que permanecen con nosotros en el tiempo, porque no se consumen, o mejor dicho, no lo hacen de forma inmediata. Un televisor, un coche, una parcela, una vivienda o acciones de una empresa eléctrica, por poner algunos ejemplos.
También hay una salida de dinero y una compra, pero la recompensa la obtendremos posteriormente. Es más duradera, diluida en el tiempo y no de forma inmediata.
Otra diferencia entre gasto e inversión que te aclarará muchísimo el concepto será considerar inversión todo aquello que podrías vender y obtener dinero con su venta, que puede ser más de lo que pagaste, igual o menos. Pero si se puede vender, será una inversión.
Otra característica de las inversiones y por lo que se las considera como algo bueno es que nos aportan beneficios mientras las tenemos. Por ejemplo, el coche nos lleva al trabajo o nos traslada de un sitio a otro durante varios años; la vivienda nos acoge, nos da seguridad a lo largo de nuestra vida. Estamos invirtiendo en nuestro bienestar, en nuestra familia.
Pero puede darse el caso de realizar inversiones con el propósito exclusivo de obtener beneficio económico, un ingreso complementario, un enriquecimiento, para usarlo en ocio, en bienestar, ahorrarlo para el futuro, consignarlo para posibles contingencias, o cualquier otro destino. Por ejemplo, la compra de las acciones.
En este caso, renunciamos a un dinero presente con la esperanza de poder venderlas más adelante, cuando el precio sea mayor, y ganar dinero con ello.
Las inversiones de carácter especulativo tradicionalmente están ligadas al ámbito empresarial, pero cada vez se presta.
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